El maridaje es uno de los conceptos más fascinantes del mundo gastronómico, pero también uno de los que más dudas genera. Pero, aunque inicialmente puede parecer complicado, comprender sus principios básicos puede transformar cualquier experiencia culinaria en una aventura inolvidable.
¿Qué es el maridaje?
El maridaje es la armonía entre la bebida y la comida, y aunque fundamentalmente al hablar de maridaje nos referimos a la combinación entre vinos y comida, también otras bebidas pueden ser parte de esta conexión. Se trata de encontrar el equilibrio perfecto para que ambos elementos se potencien mutuamente.
Sin embargo, para entender mejor el maridaje, resulta útil explorar su antítesis: el anti-madridaje. Por ejemplo, combinar un bizcocho con morcilla o chocolate con un vino muy ácido puede resultar desagradable, ya que estos sabores se repelen entre sí.
Retos comunes en el maridaje
- El chocolate: Aunque es un alimento complicado de maridar, existen opciones excelentes. Los postres de chocolate combinan muy bien con bebidas que tienen notas anaranjadas, como el licor de mandarina o un vino dulce como el Banyuls, un tinto dulce del sur de Francia elaborado con Garnacha.
- Consejo: Evita acompañar chocolate con cavas brut, ya que la acidez y sequedad de estos vinos suelen chocar con la dulzura del postre. Opta por un cava semi o dulce para un equilibrio perfecto.
- Los espárragos y alcachofas: Estos vegetales, debido a su amargor natural, son enemigos naturales del vino. La interacción entre sus compuestos amargos y los taninos del vino puede ser desagradable. No obstante puedes encontrar blancos ácidos o espumosos que mariden bien. ¡Inténtalo!
- Los aperitivos amargos: Aunque los aperitivos como el vermut o los bitter estimulan el apetito, sus sabores fuertes pueden afectar la percepción de vinos más sutiles, como un champagne o un blanco ligero. Para iniciar una comida con elegancia, opta por un cava joven y alegre acompañado de canapés suaves.
- Sabores fuertes (ajos, especias, ahumados): Busca vinos con crianza o blancos aromáticos que igualen su intensidad. Nuestro Ibis Magnum , Diània negre o Diània blanc son perfectos para ello ¿los pruebas?
Cómo saber el maridaje de un vino
El maridaje se basa en la búsqueda del equilibrio. Aquí van algunas reglas esenciales:
- Platos suaves con vinos suaves: Un pescado blanco o una ensalada fresca encontrará su mejor compañero en un vino blanco ligero.
- Platos potentes con vinos robustos: Una carne roja o un guiso especiado demandan vinos con cuerpo que estén a su altura.
Una analogía interesante es pensar en el maridaje como el boxeo: un peso wélter no compite contra un peso pesado. Los sabores deben estar en equilibrio para que ninguno domine sobre el otro.
Curiosamente, dentro de los tipos de maridajes, existe uno llamado maridaje por contraste, que precisamente lo que busca es la sorpresa en la combinación de sabores teóricamente opuestos. En este post sobre tipos de maridajes te dejamos más información por quieres saber más sobre ellos.
Consejos finales sobre maridaje
Para quienes desean aventurarse en el mundo del maridaje, el consejo más importante es experimentar. Prueba combinaciones nuevas, aprende de los errores y encuentra tus propias armonías. Recuerda que cada plato y cada vino tienen su historia, y descubrir cómo se complementan es parte del placer.
Consejos para un maridaje perfecto
- La acidez del vino debe ser igual o mayor que la de la comida: Esto evita que la bebida se sienta apagada.
- La dulzura del vino debe ser igual o mayor que la del plato: Especialmente importante en postres.
- Intensidad equilibrada: Platos delicados requieren vinos sutiles, mientras que platos fuertes necesitan vinos potentes.
- La cocción importa: A mayor tiempo de cocción, mayor graduación alcohólica puede tener el vino.
- Considera salsas y cremas: Son elementos clave en el maridaje, a veces más importantes que el alimento principal.
Sin lugar a dudas un tema apasionante para profundizar y sobre todo atreverse.